Las proteínas son nutrientes esenciales para el cuerpo humano, ya que ayudan a formar y reparar músculos, órganos, piel y otros tejidos. También participan en funciones importantes como la digestión, la producción de hormonas y el fortalecimiento del sistema inmunológico.
Están compuestas por pequeñas compuestos llamados aminoácidos, algunos de los cuales deben obtenerse a través de la alimentación. De los 20 aminoácidos que existen, 9 son esenciales, lo que significa que nuestro cuerpo no los puede producir y debemos obtenerlos a través de alimentos como carne, pescado, huevos, leche, legumbres y frutos secos.
Las proteínas de origen animal se consideran de alta calidad porque contienen todos los aminoácidos esenciales que nuestro cuerpo necesita. Se encuentran en carnes, pescados, huevos, leche y derivados.
Las proteínas vegetales: Están en legumbres (frijoles, lentejas, garbanzos), cereales (arroz, avena, quinoa), frutos secos y semillas. Algunas pueden ser incompletas en aminoácidos esenciales, pero combinarlas adecuadamente (como arroz con frijoles) puede suplir esta necesidad.
La carne, ya sea de pollo, pavo, conejo, borrego, cerdo o res, así como el pescado, son buenas fuentes de proteína, sin embargo, la res tiene un mayor uso de recursos e impacto en el planeta. Los huevos son una excelente opción de proteína, más barata y disponible para todos.
